Para estar bien con nosotras mismas… y vivir relaciones sanas con los hombres…
Primero necesitamos sanar el primer vínculo: mamá.
Porque fue con ella donde aprendimos:
💔 cómo merecemos ser tratadas
💭 qué tenemos que hacer para ser vistas
😔 cuándo es seguro expresar lo que sentimos
Y muchas veces, sin darnos cuenta…
Repetimos con los hombres lo que nos dolió con ella.
Nos sentimos no elegidas. No vistas. No valoradas.
Y seguimos buscándola… en cuerpos que no son suyos.
Por eso hoy quiero regalarte esta meditación.
No para perdonarla.
No para justificar nada.
Sino para liberarte del peso que llevas dentro desde entonces.
🧘♀️ Recuerda: ponte los cascos, coge un cojín cerca…
Y date este momento. Solo tuyo. Sagrado.