Puedes decir “soy independiente”,
pero vibrar miedo.
Puedes decir “me elijo”,
pero actuar desde la carencia.
Los hombres no responden tanto a las palabras,
responden a la frecuencia.
Puedes decir “soy independiente”,
pero vibrar miedo.
Puedes decir “me elijo”,
pero actuar desde la carencia.
Los hombres no responden tanto a las palabras,
responden a la frecuencia.