Cómo hacerlo:

• Coloca una mano en el pecho y otra en el vientre.
• Nómbrale a tu cuerpo en voz baja: “Aquí estoy contigo”.
• Respira tres veces profundo.

Qué produce:

• Apaga el exceso de pensamiento.
• Te devuelve a tu energía femenina.
• Genera calma y claridad al instante.

🕒 ¿Cuándo hacer este ritual

Este ritual es oro puro para mujeres con mucha responsabilidad o con tendencia a vivir “desde la cabeza”.
Funciona especialmente en momentos donde la mente toma el control y el cuerpo queda desconectado.

Recomiendo hacerlo:

✨ Antes de cualquier decisión importante

Así evitas decidir desde el miedo, la prisa o la proyección mental.

✨ Justo antes de hablar con un hombre que te mueve emocionalmente

Sea mensaje, llamada o encuentro en persona.
Te baja al cuerpo y evita que entres en energía masculina.

✨ Cuando sientas que te aceleras o te “vas de ti”

Ese momento en el que notas que te sube la presión mental, se te cierra el pecho o te invade la anticipación.

✨ Después de una situación laboral o familiar de mucha exigencia

Para volver a tu verdad y no arrastrar la energía tensa hacia tus relaciones.

✨ Si notas que estás pensando demasiado en un hombre

Para cortar la rumiación y volver a tu centro femenino.

✨ Antes de dormir

Te ayuda a soltar el día, calmar el sistema nervioso y descansar desde la presencia.

✨ Cuando te sorprendas en piloto automático

Tres respiraciones…
y vuelves a tu eje.